Efecto de la castración de perros macho en el uso del órgano vomeronasal

La castración de los perros macho (Canis familiaris) es una práctica común en mascotas (poster CSF 2010), pero su impacto en el comportamiento social de la especie no se conoce bien. Se ha observado que los perros macho investigan la orina de sus congéneres principalmente olfateando, a veces lamiendo la fuente de orina, seguido de castañeteo de dientes y salivación (Dunbar 1977). Estos comportamientos de tipo flehmen (FLB) se cree que mueven moléculas no volátiles más pesadas al órgano vomeronasal (VNO), donde se descodifica la información. En diversas especies se ha reportado que la castración produce una reducción del FLB. En otras especies, las moléculas volátiles y no volátiles codifican dos tipos diferentes de información (por ejemplo, el ratón Mus musculus; Hurst & Beynon 2004), por lo que es posible que los machos castrados sólo perciban una parte del mensaje disponible. Se investigó el efecto de la castración en el uso FLB de los machos en tres escenarios.

Los datos se recopilaron durante un paseo corto con perros en un refugio. Se observaron casos de FLB con una frecuencia significativamente mayor (Chi-cuadrado; p<0,0001) en perros machos intactos (n=20) que castrados (n=20). En el jardín del perro sujeto, un número significativamente mayor de machos intactos (n=12) que castrados (n=10) mostraron FLB (Exacto de Fisher p=0,39) tras la exposición a dos estímulos de orina de un macho intacto y de un macho castrado. En esos casos, sólo la orina de castrados, y no la de los intactos, provocó FLB. Además, durante los ensayos de comportamiento con estímulos de orina de perros donantes castrados, el número de perros intactos fue significativamente mayor que el de los castrados (Chi-cuadrado; p=0,002).

Teniendo en cuenta la posible división de la información entre los componentes volátiles y no volátiles de la orina, sólo los perros que utilizan el olfato y el órgano vomeronasal pueden acceder al mensaje completo transmitido a través de las marcas de orina. Debido a la elevada proporción de perros macho castrados, el correcto funcionamiento de la comunicación olfativa canina puede verse considerablemente afectado por esta intervención médica rutinaria.

Fuente original del estudio (en inglés): https://www.researchgate.net/publication/257626379_The_effect_of_castrating_male_dogs_on_their_use_of_the_vomeronasal_organ_when_investigating_conspecific_urine_deposits